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martes, febrero 13, 2007

espuesta al cambio climático


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Al mismo tiempo que el gobierno de Estados Unidos discute qué hacer con respecto al calentamiento global, mariposas, operadores de teleféricos, osos polares y diseñadores de plantas hidroeléctricas ya comenzaron a actuar por su cuenta.

Cada uno por su lado, criaturas salvajes, ejecutivos empresariales y planeadores regionales responden a los cambios climáticos que están rápidamente recalibrando sus posibilidades de supervivencia, en busca de mayores ganancias o bien de una manera más efectiva de entregar servicios públicos.

Las mariposas, por ejemplo, están, literalmente, votando con sus alas, ya que abandonan el sur de Europa y se dirigen más al norte en busca de climas más benignos en Finlandia.

Petición de operadores

Los operadores de teleféricos para los amantes del esquí en el Oeste cabildean en busca de que se les renten tierras federales en terrenos más altos de las Montañas Rocallosas, a fin de poder alcanzar las áreas nevadas que cada vez están más arriba.

Los osos polares que poblaban toda la Bahía Hudson están perdiendo peso en cantidades preocupantes y su número baja de modo alarmante, al mismo tiempo que el hielo se derrite y se acorta su temporada de alimentación.

Los diseñadores de plantas de energía en la región Noroeste del Pacífico, que recibe tres cuartas partes de su electricidad de las presas hidroeléctricas, se reúnen en sesiones diseñadas para elaborar planes de emergencia contra los deshielos adelantados, la mayor duración de las lluvias invernales, el menor flujo de las corrientes de los ríos durante el verano y las escasez de electricidad durante los veranos más secos y calientes.

Clara conclusión

Una síntesis recién publicada de 866 estudios reanalizados sobre el efecto del cambio climático en plantas silvestres y animales halló lo que su autora, Camille Parmesan, profesora de Biología de la Universidad de Texas en Austin, describe como “una conclusión clara y globalmente coherente”.

Flora y fauna están emigrando al Norte o escalando a terrenos más altos cuando pueden, explicó Parmesan, cuyo documento se publicó en el número de diciembre de la Revisión Anual de Ecología, Evolución y Sistemas.